La psicomotricidad es una disciplina que, basándose en una concepción integral del ser humano, se ocupa de la interacción entre el conocimiento, la emoción, el cuerpo y el movimiento. Sin embargo, cuando escuchamos hablar de "Psicomotricidad" aún se suele pensar sólo en actividades físicas o gimnasia, pero tal y como su nombre nos indica, la psicomotricidad es una disciplina que se ocupa por un lado de la "psique" y por otro, de la parte "motriz" abarcando así el desarrollo global del niño (movimiento, emoción y cognición).

Si tenemos cuenta que, en un niño de 0 a 6 años, el movimiento es su principal característica, la psicomotricidad es una disciplina básica e importantísima en su desarrollo. Estas técnicas, le ayudarán a desarrollar todos los aspectos del movimiento corporal y a perfeccionarlos.  Existen distintas formas de intervención psicomotriz que pueden ser aplicadas en diversos ámbitos como el preventivo, educativo y/o terapéutico.

Entre los objetivos a trabajar, en esta disciplina, hallamos: controlar las nociones de orientación estática (delante, detrás...), descubrir el propio cuerpo como un elemento de creación y juego, desarrollar la expresividad corporal, desarrollar la coordinación y el equilibrio, tomar consciencia de los movimientos y adquirir precisión en ellos, etc.